El cuidado y mantenimiento de tu equipo de esquí es esencial para garantizar su durabilidad y rendimiento óptimo. A medida que la temporada de esquí llega a su fin, es importante tomar medidas para conservar tu equipo en las mejores condiciones posibles para la próxima temporada. Aquí te ofrecemos algunos consejos para mantener tu equipo de esquí en perfecto estado durante el verano.
Conservación de los esquís
El primer paso para mantener tus esquís en buen estado es encontrar un lugar adecuado para almacenarlos. Este lugar debe tener una temperatura estable y baja humedad. Los esquís deben apoyarse de tal manera que no se fuerce su forma original. Los frenos de la fijación tampoco deben tener presión, ya que esto podría alterar la forma natural de los esquís.
Mantenimiento de las fijaciones
Las fijaciones son una parte esencial de tus esquís y también requieren un cuidado especial. Es importante asegurarse de que no estén bajo presión durante el almacenamiento. Esto puede evitar que se deformen o se dañen durante el verano.
Cuidado de las suelas
Las suelas de tus esquís también necesitan atención. Un buen mantenimiento de las suelas puede ayudar a prolongar la vida útil de tus esquís y a mejorar su rendimiento en la pista. Es recomendable aplicar una capa de cera a las suelas para protegerlas de la sequedad y el agrietamiento.
Cómo encerar esquís
Encerar los esquís correctamente puede hacer una gran diferencia en tu experiencia de esquí.
Preparación: Primero, limpia las suelas de tus esquís. Si hay residuos de cera antigua, utiliza una rasqueta de plástico para quitarla. Puedes usar un limpiador de suelas específico para eliminar cualquier suciedad y aceites.
Aplicar la cera: Escoge la cera correcta en base a la temperatura de la nieve en la que vas a esquiar. Cada cera tiene una gama de temperaturas en las que funciona mejor, así que asegúrate de elegir la correcta. Derretir la cera sobre la suela de los esquís utilizando una plancha de encerado.
Distribuir la cera: Pasa la plancha lentamente sobre los esquís para distribuir la cera derretida uniformemente. Asegúrate de que toda la suela de los esquís quede cubierta por la cera.
Dejar enfriar: Una vez que la cera se ha aplicado uniformemente, deja que los esquís se enfríen y que la cera se endurezca. Esto suele llevar alrededor de una hora.
Raspar el exceso de cera: Con la rasqueta de plástico, raspa el exceso de cera de las suelas de los esquís. Debes raspar desde la punta hasta el final del esquí.
Cepillar los esquís: Finalmente, utiliza un cepillo de esquí para pulir la suela. Cepilla en la misma dirección en que raspaste la cera, desde la punta hasta el final del esquí.
Siempre es mejor encerar tus esquís en un lugar bien ventilado ya que los vapores de la cera pueden ser dañinos. Además, nunca dejes la plancha en un solo lugar en los esquís por mucho tiempo ya que el calor excesivo puede dañar las suelas.
El cuidado y mantenimiento de tu equipo de esquí no termina cuando la temporada de esquí se acaba. Al seguir estos consejos, puedes asegurarte de que tu equipo esté en las mejores condiciones posibles para cuando llegue la próxima temporada. Recuerda, un buen mantenimiento no solo prolonga la vida útil de tu equipo, sino que también puede mejorar tu rendimiento en las pistas.